8ª reflexión: Tres cosas salvadoras o destructivas

Por Sheij ; Taha Fathy Hendy

Alabado sea Allah y que la paz y las bendiciones de Allah sean con nuestro amado profeta Muhammad, su familia, sus compañeros y todo aquel que siga su ejemplo.

Bienvenidos hermanos y hermanos: Aselemu aleikum, que Allah resplandezca vuestros rostros y haga que seamos de los que escuchan las palabras y siguen las mejores de ellas.

Con una nueva reflexión en este bendito y generoso mes de ramadán, que Allah nos acepte el ayuno y las buenas obras.

Abu Hurairah, que Allah esté complacido con él, narró que el profeta (sws) dijo: ((Que se manche de polvo la nariz de quien alcanza Ramadán sin que haya sido perdonado, entonces dije: amén; que se manche de polvo la nariz de aquel cuyos padres llegan a la vejez junto a él y no sean motivo para que entre al paraíso, entonces dije: amén y que se manche de polvo la nariz de aquel ante quien menciona mi nombre y no pide a Allah paz y bendiciones para mí, entonces dije: Amén)) Mancharse la nariz de polvo simboliza la humillación y la vergüenza.

Ese hadiz, en sus diferentes narraciones, habla de la gran recompensa y el excelente mérito que hace que el ser humano esté cerca de su Dios y lejos de su castigo. La persona que se esfuerza en las prácticas rituales y los actos de obediencia durante el mes de ramadán, se arrepiente ante Allah, Altísimo sea y sale del mes de ramadán con sus faltas perdonadas, habrá conseguido su sitio en el paraíso, debe ser felicitado. En cambio, aquella persona que le llega ramadán, pasa por delante y termina sin que provoque nada sublime en él, en sus prácticas, en su acercamiento a Allah y en los actos de bondad, el profeta (sws) la maldijo. En una de las versiones del hadiz, el profeta (sws) dice: ((Me vino el ángel Gabriel cuando puse el pie en un peldaño del púlpito y me dijo: ¡Oh Muhammad! Será alejado o destruido aquel que haya alcanzado ramadán sin que se le hayan perdonado sus faltas, y Allah le hará entrar al infierno, entonces dijo: Amén))
El profeta (sws) insiste mucho en eso, en muchos hadices de los cuales hemos mencionado algunos al hablar del mes del ayuno. Dice: ((En el mes de ramadán se abren las puertas del paraíso y se cierran las del infierno)) quiere decir que la persona debe esforzarse mucho para llegar a su sitio en el paraíso, sino será de entre los que hayan sido alejado por Allah y sus narices se mancharon de polvo debido a la falta de valor que tienen.

La segunda cosa más importante es la piedad filial y ya tendremos una reflexión especial sobre el tema. Pero cabe preguntarse ¿cómo puede ser que una persona que ayuna en el mes de ramadán y no tiene piedad por sus padres? Aquel que tiene piedad por sus padre, no los obedece en lo debido y no los trata bien aunque fueran no musulmanes, entra incurre en la ira de Allah, Glorificado sea, y la del profeta (sws). Los padres son uno de los portales que Allah abre ante sus siervos alcanzar el paraíso, pues se dice que el paraíso está debajo de los pies de la madre, de los padres y en la piedad con ellos. Que se manche la nariz de polvo y se humille aquel que no tiene piedad por sus padres.

Allah, Altísimo sea, hizo descender al profeta (sws) un mensaje que nos dio respeto y valor entre la gente, es más nos concedió una categoría en los cielos con que Allah nos honró, y ¿qué menos que pedir que la paz y las bendiciones de Allah sean con nuestro profeta cuando se menciona su nombre? El profeta (sws) dijo: ((quien pide por mi paz y bendiciones una sola vez, Allah lo hará por él diez veces)), y eso le garantiza la intercesión del profeta (sws).

Esas son las 3 cosas salvadoras en este mes de ramadán, tres pequeñas cosas pero con una recompensa y mérito enormes. Así que quien alcance ramadán, debe cambiar a mejor; si sus padres aun viven, que los trate con piedad, y si ya están muertos, que rece por ellos junto con sus rezos, dé limosna por ellos, ayune por ellos con su ayuno, suplique a Allah por ellos, mantenga sus lazos de sangre y de amistad, pues todo eso entra en la piedad filial después de la muerte y en vida.

Que la paz y las bendiciones de Allah sean sobre nuestro amado profeta, y que se complazca con nosotros Allah y su profeta (sws).

Hasta la próxima reflexión, inshallah