Jutba del viernes 21 de agosto 2020

Con Sheij Taha Fathy Hendy

Lecciones de la emigración del Profeta, que la paz y las bendiciones de Allah sean con Él (2)
Traducción resumen:
Alabado sea Allah, Dios del universo, y que la paz y las bendiciones de Allah sean con el mejor de los enviados, nuestro profeta Muhammad, con su familia y con sus compañeros.
“¡Creyentes! Temed a Allah con el temor que Le es debido y no muráis sino como musulmanes.” (Al-Imrán: 102)
Queridos hermanos y hermanas: Seguimos con las lecciones y las moralejas de la emigración del Profeta (sws), que son una referencia para nosotros y bases para construir nuestra realidad tal como lo hizo nuestro amado profeta (sws). De esas moralejas más grandes, mencionamos:
Una lección sobre el amor al Profeta (sws)
El Profeta (sws) gozaba de la belleza interior y exterior, la magnifecencia, las mejores modales y su mérito sobre todos los musulmanes al guiarlos hacia la senda recta y alejarlos del infierno.
En cuanto a la descripción de su aspecto, ninguna belleza igual la suya; y en cuanto a sus modales, nadie era más perfecto que Él; en cuanto a su benevolenciay su mérito sobre toda la gente, especialmente los musulmanes, nadie es más leal que Él.
Allah, Altísimo sea, dice en la aleya 31 del sura de Al-Imrán: “”. Es una de las grandes pruebas que confirman la obligatoriedad de amar al Profeta (sws), entonces no cabe duda de que amar a Allah es una obligación y seguir al Profeta (sws) y amarlo es un camino hacia el amor a Allah. A ese respecto, las aleyas son muchísimas.
Por eso, el amor al Profeta (sws) alcanza el grado más alto, pues Él es merecedor de que los corazones y las almas emanan, en todo momento, todo el amor por Él, en todas las circunstancias, por eso debemos asimilar la grandeza de este amor.
Durante la emigración, el Veracísimo, Abú Bakr, que Allah esté complacido con él, dio ejemplo más maravilloso de amor por el Profeta (sw). Vimos como estaba dispuesto sin esperar ni orden ni pedido, sino que se esforzó en perfeccionar su amor por el Mensajero de Allah (sws), prueba de ello, le preparó un camello, lloró de alegría al saber que le iba a acompañar, le limpia la cueva, caminaba delante y detrás de Él y más posturas suyas de las cuales no hemos mencionado sino pocas.
Abú Bakr amaba al Mensajero de Allah (sws) y el amor al Mensjero de Allah (sws) no es solamante un mérito sino una obligación. Quien hace prevalecer otro amor sobre el amor al Mensajero (sws), estará incurriendo en un peligro grave, pues Al-Bujarí y Muslim narrarón que Anas Ibn Málik dijo: El Mensajero de Allah (sws): “”
En un relato de An-Nasaí: “”
Que la paz y las bendiciones sean con el mejor de los profetas y mensajeros, su familia y sus compañeros.