Reflexiones con el Sheij Taha Fathi (5)

Traducción:

Selemu Aleikum, y que la paz y las bendiciones de Allah sean con nuestro amado profeta, Muhammad, su familia, sus compañeros y todos los que los que siguen su ejemplo.

Queridos hermanos y hermanas, que Allah resplandezca vuestros rostros.
Rogamos a Allah, el Generosísimo, Señor del trono magnánimo, que nos proteja de esa epidemia y que haga que seamos de los que escuchan las palabras y siguen las mejores de ellas.

Y rogamos a Allah que acepte esos momentos en la balanza de nuestras buenas acciones el día que no aprovechen hacienda ni hijos varones, excepto a quien vaya al encuentro de Allah con corazón sano.

Seguimos con estas reflexiones de fe en el mes de shaabán, así que rogamos a Allah que nos bendiga este mes y nos haga alcanzar el mes de Ramadán.
En medio de lo que estamos viviendo, la gente está preocupada por dos cosas: Primero, la preocupación que supone esa epidemia que azota el mundo entero, luego la procuración por conservar y proteger los negocios y los bienes y como protegerlos con este estancamiento económico. La verdad es que Allah, Glorificado sea, cuando hizo establecer esa legislación, lo hizo junto con un garante para el musulmán, garantizándole protección contra la enfermedad y protección de los bienes con una única herramienta que no es otra que la caridad. Por eso hablaremos del efecto de la caridad contra el daño y a favor del aumento y la bendición de los bienes. Allah, Altísimo sea, dice en el Noble Corán, a su Profeta (sws): “¡Deduce de sus bienes una limosna para limpiarles y purificarles con ella!” Attawba: 103. Y el Profeta (sws) dice: ((inmunizad a vuestros bienes con el pago de la zaka y curad a vuestros enfermos con el pago de la limosna)). Nuestro amado Profeta nos indica que quien quiere proteger sus bienes, bendecirlos y aumentar sus beneficios, y también salud para él y para su familia, que de zaqa y limosna. Seguro que los ejemplos son tantos que no caben en esta reflexión, pero en los momentos en que estamos viviendo, cada musulmán y cada musulmana debe dar limosna y que sepan que, con ello, Allah, Altísimo sea, levantará esta aflicción, así que rogamos a Allah que lo haga en todo el mundo.

Por todo eso, el CCIV ha creado un proyecto de caridad durante el mes de Ramadán, y como bien sabéis el centro daba comida a un gran número de ayunantes durante ese mes. Quizás cuando llegue el mes de Ramadán estaremos todavía confinados en nuestras casas, pero Allah, Altísimo sea, nos envía quien nos abre esa puerta del bien, la puerta de la limosna y la ruptura del ayuno. Inshallah, publicaremos la forma y los números de las cuentas bancarias donde se puede ingresar el dinero. Es un gran proyecto porque cubre el mes de Ramadán y la súplica de acabar con la epidemia. Os animamos a participar
Rogamos a Allah que proteja a nuestro país y al resto del mundo de esa epidemia y que nos permita volver a llenar sus casas.

Y que la paz y las bendiciones de Allah sean con nuestro amado profeta, Muhammad, su familia, sus compañeros y todos los que los que siguen su ejemplo.